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Te damos algunos secretos para que cuides tus muebles y puedas disfrutar de ellos durante mucho tiempo:
No uses disolventes ni removedores para la limpieza, usa un paño húmedo limpio.
Evita golpes y rayones con objetos contundentes y punzantes.
Utiliza agua siempre en mínimas dosis sobre un paño humedecido para limpiar restos de polvo o suciedad. Luego seca siempre con un paño seco. Si derramas líquido, sécalo inmediatamente para que no quede manchado.
No expongas tus muebles a rayos solares por tiempos prolongados para que no se decoloren y deformen ya que están fabricados con productos naturales y químicos sensibles a la sobre exposición solar.
Te recomendamos instalar películas protectoras contra rayos U.V.
Evita poner objetos calientes sobre ellos; trata de usar siempre objetos aislantes, especiales para poner cosas, tales como posavasos, individuales, un mantel grueso, etc.
Con los objetos decorativos usa un paño o elementos para evitar rayones en las superficies.
